Ingredientes:
1 queso fresco pequeño
8 mejillones
Queso rallado
Ali oli
1 tomate
Orégano
Aceite
Cortamos el queso en rodajas de un centímetro y las poner sobre una fuente para el horno.
Pelamos el tomate, lo picamos y ponemos una cucharada sobre cada rodaja de queso, añadimos sal y un chorreón de aceite.
Ponemos unos trocitos de mejillones, si no los tenemos frescos los podemos poner de lata pero al natural.
Añadimos una cucharadita de ali oli por encima, espolvoreamos con queso rallado y con el orégano y
los horneamos en el horno precalentado a 200º unos diez minutos.
Los mejillones se pueden cambiar por otro ingrediente como bacon, jamón o atún.
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